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Revísalas bien: la multa de la DGT por tener las luces de tu coche en mal estado
Las luces del coche son parte de los elementos de seguridad activa disponible de mayor antigüedad y que los conductores suelen utilizar automáticamente. No obstante, tal y como recoge la DGT desde el código de circulación, esto se penaliza con importantes sanciones, y en muchos casos no se trata más que de un despiste.
Tenemos que cumplir la máxima de «ver y ser vistos»
Lo vemos todos los días: los accidentes con peores resultados se producen cuando hay menor visibilidad. Por eso es importante velar por el correcto funcionamiento del sistema de alumbrado y de señalización de nuestro coche, el cual cumple la máxima de ver y ser vistos.
Entonces, ¿pueden multarme por circular con una luz fundida? ¿Y si uno de los faros está roto? La respuesta a las dos preguntas es, rotundamente, sí. Tanto circular con las luces apagadas, como con un piloto o faro roto, o con alguna luz fundida es motivo de sanción, como explica la DGT, la Dirección General de Tráfico.
El Reglamento General de Vehículos, establece las características de los distintos dispositivos de alumbrado cuando se refiere al de cruce y señala el número de luces con el que se deberá circular, según el tipo de vehículo (que será de dos sin excepción en los automóviles y en los vehículos de tres ruedas que superen los 1300 mm de anchura).
Si llevas alguna luz fundida te caerá una importante sanción
Es así que un olvido en carretera puede resultar muy costoso, por lo que conviene utilizarlas exclusivamente cuando sea oportuno. Es verdad que lo más habitual es que no nos hayamos dado cuenta de que una luz no funciona correctamente, por haberse fundido recientemente, y que se trate únicamente de un despiste.
Por fortuna, es común que un agente simplemente nos informe del defecto, nos conmine a ir a cambiarla lo antes posible, y nos deje continuar. Alternativamente, el agente podría pedirnos que la sustituyamos in situ, si tenemos recambios en el coche y las circunstancias lo demandan. No obstante, solo podremos seguir nuestro camino si no supone un peligro para nosotros mismos o el resto de usuarios de la vía.
De todas formas, los hay que no lo son tan permisivos y el riesgo de que nos impongan una sanción está ahí, especialmente si la infracción es importante: una luz rota o, en su caso, llevar más de una fundida. Por eso debemos estar atentos a nuestro sistema de iluminación y, por tanto, solventar cualquier problema que podamos tener a la mayor brevedad.
Hasta 200 euros por una iluminación deficiente
Así, y como nos avisa la misma DGT, el Reglamento General de Circulación contempla la posible sanción por circular con un sistema de iluminación deficiente en nuestro coche. Concretamente serán 200 euros de multa, una sanción que puede además derivar incluso en la inmovilización del vehículo.
Aquí se explica, entre otras cosas, que los turismos deben tener dos luces de cruces delanteras. Si llevásemos una luz fundida, entonces solo estaríamos llevando una, luego estaríamos incumpliendo la normativa, y por tanto se nos podría aplicar dicha multa.
Igualmente, cabe mencionar que desde 2010 ya no es obligatorio llevar repuestos de las bombillas de nuestro coche. En ese año se eliminó la disposición del Reglamento General en la que se recogía la obligatoriedad de llevar bombillas de repuesto. ¿El motivo? La creciente complejidad de los coches más modernos, en los que, en algún modelo, para cambiar una bombilla, se requiere desmontar incluso ¡el paragolpes!